La Junta de Gobierno Local ha aprobado de manera inicial los proyectos ejecutivos para adecuar los patios de dos escuelas de infantil y primaria: la Escuela Municipal Salvador Llobet y la Escuela Maestros Montaña. Ambos centros hicieron una propuesta para reformar sus patios que resultaron ser uno de los nueve proyectos ganadores dentro del proceso de presupuestos participativos que emprendió el Ayuntamiento.
Ambas escuelas han contado con el asesoramiento de dos profesionales de la arquitectura, que les han ayudado a plasmar sus ideas y repensar las propuestas que inicialmente tenían. Estas profesionales finalmente han elaborado los proyectos básicos que han servido a los técnicos municipales para convertirlos en proyectos ejecutivos.
En el caso de la Escuela Municipal Salvador Llobet la propuesta de remodelación surgió del AMPA del centro que contó con la arquitecta M. Carmen Artero Borruel. Su proyecto preveía que el alumnado pudiera disfrutar de un patio con más plantas y arbolado (actualmente hay pocas sombras), elementos lúdicos y espacios diferenciados de juego, teniendo en cuenta también que se trata de un espacio público abierto a la uso de la ciudadanía en horario extraescolar.
En términos generales el proyecto ejecutivo propone transformar la gran superficie plana de arena existente entre el edificio de la escuela y la pista polideportiva. Se prevé modificar el relieve del espacio e introducir vegetación, creando siete zonas diferenciadas, tanto por el uso como por los elementos que las definirán. Las diferentes zonas quedan conectadas entre ellas por un camino de acceso que asegura el paso de peatones y el de vehículos en caso de emergencias o tareas de mantenimiento.
Así, habrá la zona del olivo adyacente a las aulas de infantil, con una gran olivo, naranjos y dos estructuras de madera, un tipi grande y un tipi medio; el espacio arenal-río, con limoneros y una depresión en la topografía entre dos espacios de juego con arena, y una tipi media y una tipi grande de madera -la existencia de una fuente en el extremo de este espacio permitirá la ubicación de un juego de bandejas de madera bajo el chorro de agua que posibilitará ver la circulación del agua hasta ir a parar al terreno o zona de río-; el ágora como espacio central y elevado, caracterizado por una rampa espiral ascendente que da acceso a los muros de piedra, colocados a modo de anfiteatro -con capacidad para 50 personas sentadas, con un tipi pequeño y árboles de copa amplia y altos en el perímetro del lado sur; la plaza delante de la puerta de salida al patio desde el edificio principal como lugar de encuentro, con el espacio con un muro de piedra a modo de banco corrido y la colocación de una isla de papeleras de madera con tres compartimentos para incentivar el reciclaje; el aula al aire libre, con la colocación de cinco mesas de madera aprovechando la existencia de una fuente en el espacio adyacente, que permitirá habilitar este espacio como aula; la colina, que por su configuración física permitiría el desarrollo de un huerto / bosque productivo y que inicialmente se plantarán almendros y algunas leguminosas para trepar en estructuras piramidales -será el área con más árboles y arbustos del patio, y el espacio de ocio y juegos de pelota, en la zona norte de pavimento duro, donde alrededor de la fuente irá un juego de agua, se pondrán varias jardineras, se reordenarán los bancos y se pondrán de nuevos, de modo que se favorezcan las conversaciones entre niños o usuarios del espacio en horario extraescolar. También se instalará dos canastas de baloncesto para crear un área de recreo conectada a la pista.
Se prevé también adecuar y acondicionar la zona pavimentada de acceso principal al patio desde la calle.
En cuanto a Maestros Montaña, la propuesta para el nuevo patio surgió de la comunidad educativa y se recogieron ideas del alumnado y del equipo de maestros. Como en el caso de la EM Salvador Llobet, el proyecto básico también fue redactado por una arquitecta, en este caso Inara Hasanova Gasanova. Su trabajo ha servido a los técnicos municipales para redactar el proyecto ejecutivo. A partir de las propuestas recibidas se ha determinado una serie de temas preferentes: resolver las inundaciones en el patio infantil; separar físicamente la pista y el patio donde juegan los niños y niñas pequeños; potenciar los desniveles para que los niños y niñas pudieran escalar; disponer de lugares tranquilos; hacer practicable la fuente; diversificar las posibilidades de juego, etc.
Así, habrá una zona central y en la salida del patio duro se creará un espacio amplio y diáfano que hará de distribuidor para acceder a otras zonas del patio de tierra y que tendrá diferentes usos: reunión, punto de partida de juegos en grupo, juegos de pelota entre equipos, espacio para ir en bicicleta, etc. También habrá el área del montículo pequeño, con un desnivel con tierra, de altura máxima de 90 cm, densamente plantado. Se trata de crear un espacio similar a un bosque natural en miniatura. Se instalará una pasarela que subirá y bajará del montículo, habilitada también para niños con movilidad reducida. En la cima del montículo se creará un túnel vegetal con arbustos.
En la zona de arenal y zona de piedras, el arenal se dispondrá como si fuera un río desde su inicio, en una fuente, y hasta la desembocadura, en un estanque. Aparte del juego con arena y agua esta zona permitirá una variedad de actividades educativas relacionadas con medio ambiente, fenómenos físicos e ingeniería. Las plantas alrededor del arenal serán típicas de terrenos fluviales. La zona de piedras sirve para "desaguar" el arenal y jugar con piedras.
Finalmente, el montículo grande, con desnivel que tiene una altura máxima de 120 cm, los árboles existentes serán delimitados por unas piedras grandes. Con las mismas piedras de canto rodado se formarán dos tramos escalables. El montículo contará con varias escaleras y una rampa para deslizarse hacia abajo. Los taludes se sembrarán con una mezcla de plantas herbáceas.
El riego de la vegetación de los dos patios se hará todo por goteo. El drenaje será natural hecho a base de zanjas y pozos de drenaje rellenos con gravas para que el agua de lluvia devuelva al subsuelo.